martes, 10 de noviembre de 2009

Histeria, la noche...

¿Hacia donde me conduce este camino incierto?, lejos, muy lejos de él...
El miedo invade mi alma, el sabor amargo del futuro se empieza a sentir
todo es confuso, me ahogo mientras busco el norte en la brújula de mi vida,
¿Hacia donde voy?, ¿hacia donde me llevas? ¿hacia donde caminaré sin él?

No somos almas sinceras después de conocer el sufrimiento,
escarnecedora es la noche, me alcanza y no puedo seguir,
Me siento perdida, desquiciada, la confusión forma parte de mi...
un deseo de muerte para este amor, un final , ¿cuándo acabará?

Noches que ahuyentan mis sueños y sueño despierta en la oscuridad,
Callada, sin calma, las lagunas de recuerdos que no acabaran,
Histéricos episodios de lunas que aparecen y se esconden de mis ojos,
Cuando aparece la noche el día se esconde, como él de mi corazón...

“Un juego peligroso”

Silencios escarnecedores, fantasías ambiguas de placer, difusos anhelos…
Basta de jugar, la verdad golpea duro contra la pared de mis sueños,
La involuntaria presencia de los sentimientos será siempre mi debilidad.

Una palabra, dos frases sin terminar, una semilla que nunca germina,
Es realmente la esperanza de ser feliz la que me ata a su recuerdo,
Basta de jugar, siento deseos de vivir, de amar, más no puedo esperar.

Pálido, desierto de caricias esta mi cuerpo y reclama poderlas sentir,
¿Qué tengo que hacer para quitarme el sabor de sus labios?, ¡lo anhelo!...
Basta de jugar, recobrando mi conciencia, ¿Cuándo empezaré a olvidar?